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FUENTE; http://www.elcorreodesalem.com/2014/03/26/peru-calabozo-perpetuo/
Perú, calabozo perpetuo
Eduardo González Viaña
El Correo de Salem
Luego de ser conducido a la cárcel de
Trujillo, César Vallejo fue llevado a un calabozo que llamaban el
“infierno”. Este innecesario trato le era inferido para humillarlo y
ponerlo cerca de un preso que intentaría matarlo.
Muy decaído, pero sin perder la dignidad, salió de allí el poeta
tres días después. El alcaide le pedía que presentara sus generales
de ley.
-Usted me debió ser presentado apenas llegó a la cárcel. ¿Donde dice
que lo han tenido?
-En el infierno.
-¿En el infierno? Ya averiguaré quién recibió dinero para ponerlo
allí. Pero, señor Vallejo, usted está equivocado. Eso que usted
llama el “infierno” es, en realidad, un calabozo, o algo mejor que
eso. Lo llamamos sala de meditación.
Ocurrió en 1920, y ha seguido ocurriendo en el Perú. El calabozo es
una forma de aislamiento penitenciario que se aplica por algunas
horas o días a los reos que han estado observando mala conducta. Si
ese régimen se prolonga, entra dentro del concepto de “tortura” tal
y como lo entiende la Convención de las Naciones Unidas.
En nuestro país, no solamente existe el calabozo sino que hay seres
humanos encerrados en él durante más de 20 años. A todo esto se
añade que se encuentran en la base militar de una isla que no fue
diseñada como centro penitenciario, y que sus familiares sufren
duras restricciones para poder visitarlos. La madre de Víctor Polay
murió hace unos meses luego de haber sido el rostro que él podía ver
unas cuantas veces en el año.
Todo esto es inhumano y degradante. Así lo han entendido los jueces
Óscar Sumar Calmet y Julio Biaggi Gómez, quienes ordenaron el
traslado a un penal del INPE para Víctor Polay Campos, Miguel Rincón
Rincón y Peter Cárdenas Schulte y Óscar Ramírez Durand.
Satanizados por toda la prensa e incluso amenazados, los jueces han
ratificado su sentencia y han defendido la capacidad que tiene todo
tribunal-y no los periódicos ni los otros poderes del estado-de
interpretar la ley con justicia.
De forma increíble, el defensor del pueblo ha dicho que es sumamente
peligroso poner a esos presos en un penal común. Por supuesto que
eso no es cierto. Personas que llegan a la tercera edad luego de
haber sufrido tan feroz aislamiento están muy lejanas de parecerse a
un Rambo.
Como lo han señalado los especialistas, en condiciones de
aislamiento prolongado se produce primero la desocialización o la
pérdida de capacidad para relacionarse con la gente. Los prisioneros
pueden perder incluso las capacidades de verbalizar oralmente o de
distinguir los colores. La falta de contacto humano puede suponer la
pérdida de la capacidad táctil o el sentir cualquier proximidad como
una amenaza En definitiva, los efectos del aislamiento suponen una
paulatina destrucción de la persona humana y son una agresión
permanente contra aquella y un escarnio contra la misma condición
humana.
No. El defensor del pueblo no los teme. Lo que ocurre es que quiere
sumarse a quienes reclaman venganza. Quiere evitar que lo confundan
porque, al fin y al cabo, una sociedad que tortura obliga a tener
personas que aceptan, que se acobardan o que fingen no saber lo que
está ocurriendo. Lo curioso es que no es ésta la misma regla con que
se mide al Sr. Fujimori, autor de crímenes contra la humanidad. ¿Es
él otra clase de terrorista con quien veladamente debemos estar de
acuerdo?
Sé que es impopular e incluso peligroso pensar en el Perú de esta
manera, y sobre todo expresarlo. Debería sentir miedo. Más miedo me
da, como cristiano, el ser preguntado mañana por el más alto de los
jueces si en los días de mi vida fui compasivo, y por lo tanto
bueno, y si me sobrepuse las amenazas y aprendí a ser valiente,
hombre libre y de buenas costumbres. |
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