Los verdaderos objetivos de
las bases militares del Tío Sam
Por: Bladimiro Begazo Begazo
Históricamente, EE.UU ha hecho creer a la opinión
pública mundial, que instalaba sus bases militares en
lugares estratégicos del mundo, para frenar la
influencia del comunismo, defender la democracia,
proteger a sus aliados y que preparaba a los militares
de esos países con fines pacíficos y garantizar la
democracia, cuando en verdad tenía como objetivos
garantizar su expansión y poder por el mundo entero,
especialmente en áreas geográficas donde se asentaban
sus intereses económicos monopólicos y donde se ubicaban
los países potencialmente peligrosos para los intereses
del imperialismo o también para imponer, vía golpes
militares, las dictaduras más sanguinarias de la
historia, tal como sucedió con Pinochet en Chile, Banzer
en Bolivia, Rafael Videla en Argentina, Alfredo
Stroessner en el Paraguay, etc. etc.
Ahora bien, en esta etapa de la historia humana, sin
subestimar la naturaleza rapaz del imperio, hoy la
geopolítica yanki ha ampliado sus objetivos a otros
aspectos y el establecimiento de bases militares en el
mundo no es casual y van en esta dirección y tienen como
argumento que son por “razones científicas”, por lo
menos esos son los fundamentos que le dijo Obama a Macri,
Presidente argentino, en la Casa Rosada.
La especialista en geopolítica, Elsa Bruzzone, asegura
que las bases de EE.UU, hoy, tienen como objetivo, no
solo el militar, sino “cerrar el cerco sobre todos los
recursos naturales que tenemos en nuestra América. Las
bases militares, cubiertas y encubiertas, que ha
instalado en Centro América y el Caribe, sumados a las
que ya tiene en Colombia, Perú, Chile, Paraguay, junto a
la base militar de la OTAN en las Malvinas, más el
destacamento británico en las Islas Georgia, cierran el
cerco sobre todos nuestros recursos naturales y
reafirman su presencia en la Antártida que es la mayor
reserva de agua dulce congelada del mundo”.
El politólogo argentino, Atilio Borón enfatiza que la
“imperiosa necesidad” de EE.UU, es asegurase el AGUA Y
NO EL PETRÓLEO. “El petróleo va a desaparecer y la
humanidad va a seguir su curso: pero si no hay agua se
acaba la especie humana y acá está casi la mitad del
agua dulce del planeta tierra. Las estimaciones van del
42% al 45%, según como se midan los acuíferos
subterráneos. Con el 7% de la población mundial, se
tiene casi el 50% de agua dulce del mundo y ellos tienen
un problema de grave desertificación”.
Por lo tanto, las bases militares norteamericanas no se
instalan en cualquier parte por casualidad; cada una de
ellas tiene sus objetivos como la base en Ushuana,
capital de Tierra del Fuego, según dicen los hijos del
Tío Sam que “es para realizar actividades científicas en
la Antártida”; otras de las bases estaría ubicada, donde
está parte de acuífero Guaraní, el mayor manantial
subterráneo de agua dulce del mundo, con un total de 1
millón 396, 000 km2. Es un manantial transfronterizo,
cuya extensión está distribuida de la siguiente manera:
Brasil, con 840,000 Km2; Paraguay, con 72, 500 Km2;
Uruguay, con 58,500 Km2; y, Argentina, con 225,000 Km2.
Otras bases conocidas son la de El Salvador (Comalpa);
Cuba, con Guantánamo; Aruba, Curacao, Puerto Rico,
Honduras, Costa Rica, Panamá y Colombia y las que están
instalando en nuestro país.
Esto no obvia, que otro de los objetivos de la
instalación de bases militares gringas, es recuperar su
presencia militar en A. Latina, donde los sectores
progresistas y de izquierda han avanzado en los últimos
15 años, aunque con algunos retrocesos.
No olvidemos defender nuestros recursos naturales para
garantizar el futuro de nuestros hijos y de la humanidad
entera.



12.05.17